Cuando estaba por terminar mi Proyecto DESAFIO 14, cuyo objetivo fue lograr las cimas de las 14 montañas más altas del mundo, tenía muy clara la idea de que el siguiente paso sería conformar un equipo de montañistas ecuatorianos para escalar en la misma Cordillera del Himalaya y también en otras cordilleras de distintas latitudes del mundo.
De ser posible, me había puesto como objetivo fundamental conformar un equipo con chicos montañistas ecuatorianos de la nueva generación, de manera que pudiera compartir con ellos los conocimientos que había adquirido a lo largo de los once años de actividad continua en la Cordillera del Himalaya. Y esto, con el objetivo de que en el momento en que yo de un paso al costado en mis actividades de montaña, cuando llegue ese tiempo, ya esté en vigencia un nuevo equipo de montañistas que puedan continuar con nuevas y más grandes actividades en el mismo Himalaya y en el resto de montañas del mundo.
Me propuse dos objetivos a mediano plazo, que ese equipo que pueda conformar, logre la cima del Everest, sin oxígeno; y también que puedan abrir una vía nueva, de ser posible en el Himalaya o en alguna otra montaña del planeta.
Esta idea arrancó inmediatamente después de haber finalizado mis 14 ochomiles. El año 2009 realicé la primera expedición con el concepto de Somos Ecuador, que es como le bauticé a este nuevo proyecto. Como es lógico a las primeras expediciones invité a colegas de mi generación hasta poder ubicar a los chicos de la nueva generación que se estaban destacando en las recientes actividades. Fue así como pude contacar con Esteban Mena y Carla Pérez, que a la postre serían el eje humano fundamental en este proyecto. En el camino se fueron incluyendo otros excelentes montañistas: Chapico Cáceres, Oswaldo Freire, Franklin Varela, Joshua Jarrín, Nicolás Navarrete.
El proyecto tuvo sus frutos. El año 2013 Chapico Cáceres, Topo Mena y Oswaldo Freire lograron la cima del Everest, sin la ayuda de oxígeno suplementario. Solo faltaba Carla Pérez, quien logró la cima tres años más tarde, en mayo de 2016. En el interín fue posible que este equipo -cambiando a Oswaldo Freire por Nicolás Navarrete- abrieran una vía nueva en el Kyzil Asker, montaña del Pamir, realizando una escalada sin precedentes lo cual les hizo merecedores de ser nominados al Piolet de Oro, máximo galardón en la comunidad del montañismo mundial.
Vistas así las cosas me doy por satisfecho por haber logrado lo que ha sido posible con este extraordinario equipo de jóvenes en Somos Ecuador, haciendo justicia a una gran reflexión de mi maestro Daniel Taroppio “Lo que no se da, se pierde”